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Se fue Silvia Pinal, la actriz que despreció a Pedro Infante, a quien pintó Diego Rivera y sacudió con Viridiana a Cannes y al Vaticano
Por: Miguel Ángel Pérez Merchant.
México despidió en el Palacio de Bellas Artes a la actriz, productora y política Silvia Pinal, la prensa y cientos de seguidores siguieron la noticia tras su deceso a los 94 años, producto de complicaciones de salud, autoridades del Gobierno, familiares, políticos y amigos de la farándula, la visitaron en una funeraria y en el máximo recinto de la cultura en México.
La Secretaria de Cultura de México, Claudia Curiel Icaza, destacó la trascendencia de la celebridad mexicana de la gran época de oro del cine nacional, “es un honor rendir homenaje a una mujer que el pueblo de México recordará con orgullo y dignidad. Aquella que construyó un puente entre la ficción y la realidad del país, cuyos personajes rompieron con los estereotipos que dominaron una época”. destacó.
En realidad las nuevas generaciones de habla hispana sólo tienen referencia de Silvia Pinal como una actriz de renombre, pero en realidad, fue un eslabón de los más grandes éxitos del cine y de anécdotas envidiables como despreciar al insistente Pedro Infante en ser su prometida, a quien solo le dio entrada a su hogar para una buena amistad y compañerismo de películas como La mujer que yo perdí (1949), Un rincón cerca del cielo (1952), ¡Sí, mi vida! (1953), entre otras.
También compartió créditos con el actor Jorge Negrete, con quien filmó historias como, ‘El inocente’, dirigida por Rogelio A. González en 1956. Pinal no solo fue deseada por los más adinerados que chocaron con sus principios de no dejarse comprar por los mejores abrigos de pieles o joyas, que las aceptó y se dejó consentir, pero jamás dominó.
Fue quien tuvo el gusto de actuar con Cantinflas, el mas grande comediante del séptimo arte como lo señaló el propio Charles Chaplin, en la cinta “El portero”, filmada en 1950, y donde el corazón del mimo se quebró -en la ficción- al no ser correspondido, como normalmente le ocurría.
¿Cómo se atrevieron Silvia Pinal y Luis Buñuel a desafiar al Vaticano y a un dictador en España con la película Viridiana?
Silvia Pinal tuvo que salir huyendo con una copia de su película Viridiana escondida entre los pliegues de su abrigo, producto de una persecución escarnecida del entonces dictador en España Francisco Franco, quien ordenó la censura total y destrucción de cada copia, por insultar la moral y a la religión en aquellos tiempos.
Pero todo empezó en 1961, Silvia Pinal y su entonces esposo Gustavo Alatriste, le ofrecieron al cineasta español filmar la película Viridiana, con Julio Alejandro, basada en la novela “Halma” (1895) de Benito Pérez Galdós. Convencidos del éxito, ganó como mejor película en Cannes y otros premios, y el ruido atrajo los reflectores, aún, a sabiendas del escándalo que vaticinó casi su extinción.
La escandalosa escena, en la película Viridiana de Silvia Pinal, que insulto la moral de aquellos tiempos y que desde el Vaticano también fue censurada por el clérigo.
Sin contar la erótica proyección de la actriz mexicana, aún así, trataron de extinguirla, pero gracias a la osadía de salir huyendo de la persecución en España es que existe la evidencia, y que gracias al cineasta Salvador Novo, vio la luz en algunas salas de cine.
Quién es Silvia Pinal
Según Wikipedia, Silvia Pinal Hidalgo nació en la ciudad de México, un 16 de septiembre de 1931. En 1949, debutó en el cine con un papel secundario en la película El pecado de Laura. Su trayectoria prosiguió desarrollándose en los cincuenta durante la Época de Oro del cine mexicano, destacando por filmes como El rey del barrio (1950), Un rincón cerca del cielo (1952), Yo soy muy macho (1953), Un extraño en la escalera (1954), El inocente (1956), y Locura pasional (1956). No obstante, logró la consagración artística y obtuvo reconocimiento internacional en la década de los sesenta, gracias a una trilogía de películas dirigidas por Luis Buñuel, que fueron: Viridiana (1961), El ángel exterminador (1962), y el largometraje Simón del desierto (1965). Es considerada como una pionera del teatro de comedia musical y de la televisión mexicana. Adicionalmente, incursionó como política y ocupó algunos cargos públicos. De 1986 a 2007, fue presentadora y productora de la serie de televisión antológica, Mujer, casos de la vida real, programa que alcanzó un estatus de culto por ciertos temas que sus episodios tocaban, algunos de los cuales han sido descritos como «perturbadores».
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