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Con casi 14 minutos de duración, el video musical de thriller de Michael Jackson marcó un hito en las industrias, de la música y el cine.

Radiografía: desmenuzando la pantalla

Radiografía: desmenuzando la pantalla

Thriller, Michael Jackson

Radiografía: Cinematografía en un video musical

Por: Brenda Ramírez Ríos

El video musical «Thriller» de Michael Jackson, con una duración de casi catorce minutos, fue un parteaguas en la historia de este tipo de producción. La estructura del video rompió paradigmas al mostrarse más bien como una producción cinematográfica. El cortometraje, dirigido por John Landis, conocido principalmente por sus películas de terror cómico, superó los límites convencionales apoyado de un equipo perfecto: la experiencia de Landis, la maestría de Rick Baker en maquillaje de efectos especiales, y por supuesto, la música del rey del pop, Michael Jackson.

 

Thriller fue uno de los videos musicales más caros de su época. El presupuesto se destinó a la contratación de un equipo de producción de primer nivel, efectos especiales, vestuario y locaciones. Cada elemento del cortometraje fue cuidadosamente diseñado para crear una atmósfera de terror y suspenso. El baile de los zombis, fue coreografiado por Michael Peters y se convirtió en un fenómeno mundial. La combinación de movimientos de jazz, gestos «repugnantes» y una sincronización perfecta entre los bailarines creó una secuencia icónica.

¿Qué lo convierte en cortometraje?

Thriller cuenta una historia completa, con un principio, un desarrollo y un final. La trama, aunque simple, es efectiva para crear tensión, es decir, tiene una narrativa estructurada.

Combina elementos del cine de terror y musical, principalmente, y hace numerosas referencias a películas de terror clásicas, como «Un hombre lobo americano en Londres» y «La noche de los muertos vivientes».

La calidad de la imagen, el sonido y la edición es comparable a la de una película de bajo presupuesto haciéndolo casi de culto.

Thriller trascendió el ámbito musical y se convirtió en un ícono de la cultura pop que ha perdurado por décadas y ha sido influencia de nuevas generaciones de artistas y cineastas alrededor del mundo.

Este trabajo es un ejemplo de cómo un video musical puede convertirse en una obra de arte cinematográfica. La combinación de una historia cautivadora, una producción de alta calidad y una actuación icónica. El video ayudó además a consolidar la imagen de Michael Jackson como un ícono pop y un innovador en la industria musical. 

 

Como dato adicional, Landis consiguió que Thriller se proyectara en un cine de Los Ángeles, ya que para poder ser candidato a las nominaciones de los premios Óscar requería proyecciones en salas de cine durante al menos una semana, sin embargo, no obtuvo la nominación. De acuerdo con Michael London de Los Angeles Times, los miembros del comité votante de la Academia eran personas de “mentalidad convencional”, entre la edad de 60 y 70 años que buscaban “historias con impacto emocional”.​ 

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