Black Panther, un éxito mundial, echó mano de la tecnología de captura de movimiento para sus icónicas escenas de lucha.
Revista Digital Interactiva
Black Panther, un éxito mundial, echó mano de la tecnología de captura de movimiento para sus icónicas escenas de lucha.
Radiografía: desmenuzando la pantalla
Radiografía: desmenuzando la pantalla
Por: Brenda Ramírez Ríos
La captura de movimiento, o motion capture es una técnica que se utiliza para registrar el movimiento de personas, animales u objetos y luego transferir esos movimientos a un modelo digital en una computadora. Esto facilita el proceso de animación digital. No solo es más rápido, sino más preciso si se quieren lograr movimientos realistas en los personajes que comparten pantalla con actores de live action.
Al actor se le colocan sensores de movimiento que funcionan como marcadores, la señal de estos llega a cámaras especiales que registran cada expresión o movimiento, de esta manera, la actuación genuina de aquel que interpreta al personaje, se transfiere a su versión digital. Esto es en especial útil para películas de superhéroes como Black Panther.
Existen tres tipos de captura de movimiento: óptica, con cámaras, que es la más común; magnética, con sensores magnéticos; e inercial, que utiliza herramientas como acelerómetros o giroscopios.
Digital Domain, el estudio de efectos visuales detrás de las memorables escenas de Black Panther, echó mano de la tecnología de Xsens, especialmente útil en secuencias de acción complejas, como las peleas en las minas o en el casino coreano..
Uno de los mayores desafíos en la producción de Black Panther fue la captura de movimiento en entornos específicos y complejos. En este caso, el uso de cámaras ópticas habría sido insuficiente debido a las obstrucciones, sin embargo, se superó este obstáculo con captura inercial.
La captura de movimiento facilita muchísimo la animación en escenas de acción o coreografías, en este caso, de lucha.
La película Black Panther, se convirtió en un fenómeno cultural y de taquilla que cautivó al público con su impresionante despliegue visual, especialmente en el trabajo de efectos visuales. Los sensores inerciales lograron capturar los movimientos de los actores sin problema, agilizando la producción, mejorando la calidad, y reduciendo los costos de producción.
La experiencia de Digital Domain en Black Panther demuestra el potencial de esta tecnología para revolucionar la industria del cine. En definitiva, una gran aportación al mundo del entretenimiento de esta era.
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