“Santa”, estrenada en 1932, fue una revolución para el cine, convirtiéndose en la primera película sonora de México.
“Santa”, estrenada en 1932, fue una revolución para el cine, convirtiéndose en la primera película sonora de México.
Radiografía: desmenuzando la pantalla
Radiografía: desmenuzando la pantalla
Por: Brenda Ramírez Ríos
Pocas películas resuenan con tanta importancia en el cine mexicano, como “Santa”. Esta producción, estrenada en 1932, capturó la atención del público con su narrativa, pero también marcó un antes y un después al convertirse en la primera película sonora de México, fue la primera en integrar una narrativa más envolvente a través de diálogos, efectos de sonido y música. Este logro técnico y artístico catapultó a la industria cinematográfica nacional hacia una nueva era, sentando las bases para lo que sería la Época de Oro del Cine Mexicano.
La película está basada en la novela original de Federico Gamboa y narra la trágica historia de Santa, una mujer, que, tras ser traicionada, se ve forzada a la prostitución. En la conservadora sociedad de los años 30, abordar este tema con tal crudeza fue un acto de valentía que generó controversia, pero también un enorme interés. La película, aunque con una visión melodramática y a menudo “masculina” de la mujer “caída”, ofrece un reflejo de las complejidades sociales de la época.
Más allá de su trama, esta película se convirtió en un espejo de la sociedad urbana de México en la década de 1930, mostrando las costumbres, los prejuicios y la moral de un tiempo de grandes transformaciones. “Santa”, fue un éxito rotundo, y demostró el potencial del cine sonoro y la capacidad de la industria mexicana para producir obras de calidad. Este triunfo incentivó la inversión y el desarrollo de nuevas producciones, preparando el terreno para el florecimiento del cine mexicano en las décadas siguientes.
Por primera vez, el público podía escuchar a los personajes hablar en español. La necesidad de grabar y sincronizar el sonido, impulsó el desarrollo de nuevas infraestructuras cinematográficas, como estudios de grabación equipados, y fomento la formación de talento especializado en sonido, desde ingenieros hasta compositores. Al poder escuchar su propio idioma en la pantalla, el cine mexicano comenzó a forjar una identidad más sólida y resonante con su audiencia, consolidando su posición como una voz cultural propia.
El milagro de la sonorización de “Santa” fue posible gracias al talento y la visión de los hermanos Joselito y Roberto Rodríguez. Ellos fueron los genios detrás de esta proeza.
Los hermanos Rodríguez, con conocimientos adquiridos en Estados Unidos, desarrollaron y aplicaron un innovador sistema de sonido óptico propio. Este sistema permitía grabar el audio directamente en la misma cinta de la película, asegurando una sincronización perfecta entre imagen y sonido.
Lo más impresionante fue que lograron sonorizar la película desde un camión adaptado, un avance que no solo era práctico, sino que también permitió al cine mexicano una valiosa independencia de la tecnología extranjera dominante en ese momento.
Bajo la dirección de Antonio Moreno y con la impactante actuación de Lupita Tovar en el papel principal, “Santa” se convirtió en ícono. La célebre canción, homónima y compuesta por el inmortal Agustín Lara, añadió una capa emocional que sigue siendo recordada hasta el día de hoy.
“Santa” es una película histórica, es un testamento de ingenio, audacia y la visión que moldeó el cine mexicano. Nos recuerda que la innovación y el arte, tienen la capacidad de transformar una sociedad.